Maravillosa vivienda de exclusivo estilo ibicenco, con vistas al mar y montaña.
En planta baja cuenta con dos dormitorios, baño, cocina-comedor con cuarto de almacenamiento y salón. En la planta alta se encuentra el dormitorio principal, con baño y cuarto vestidor.
El gran salón-comedor-cocina de planta baja cuenta con una carpintería deslizante de gran formato que se oculta embebida en los muros, planteando una transición sin obstáculos a la zona exterior donde se es recibido por una pérgola de mampostería decorativa, que hace de colchón lumínico entre el interior y exterior. Ubicada al lado la piscina, la cual esta orientada a sur y además tiene vistas hacia el mar y montaña.
La volumetría de fachada esta inspirada en la arquitectura orgánica de pequeños asentamientos urbanos mediterráneos, como pueden ser Altea y la isla griega de Santorini, donde debido a la topografía y paso del tiempo, se forman agrupaciones/racimos de volúmenes blancos aleatorios. En este caso se a procurado tener 6 cotas distintas de altura para el remate de los muros con esquinas redondeadas, dando juego a la fachada y acompañándolo con dinteles de madera decorativa.
El sótano tiene una gran superficie aprovechable para usos múltiples.
Cuenta con un solárium desde donde se pueden contemplar unas vistas privilegiadas.